Jorge Chicati Copyright

lunes, 5 de marzo de 2012

desde "alla arriba"

Las pequeñas olas venian con muchas formas, con mucho movimiento, ninguna ola era igual a otra, todas terminan en aguas moviéndose, aparentemente tan diferentes y tan iguales.
Venían en ciclos, en set’s.

Venían con fuerza, amenazando a veces con mojarlo.

El, tan tranquilo, sentado sobre aquella roca que vivía en los limites móviles que separan el agua y la tierra, entre el mar, el cielo y la tierra.

En las formas y movimientos de aquellas frias aguas, podía ver sus emociones, podía verse a si mismo.

-“La vida es como ese mar, como esas olas, la vida es tan cíclica, la vida soy yo mismo”
“La vida es esa playa, ese cielo, ese aire, esos aromas, yo soy todo eso”.

El tiempo, el dinero, el entrar en contacto necesario con aquellas personas. Todo eso lo mantenía siempre al extremo.



Sentado en la tasa de baño. Los dos codos sobre sus piernas, la cabeza entre sus manos.
Pensando, siempre pensando.

Ya tenia muchos años en que esa velocidad lo mantenía atrapado, ya tenia años en que no paraba su viaje por la vida.

Había olvidado hacer un alto, había olvidado hacer un mapa de su vida, una visión de si.

“que hacer conmigo mismo?”

En algún lugar de su ser pudo ver toda su vida, pasando frente a una pantalla. Se vio y se sintió pasando por un mundo de emociones,

“Todo es muy rápido. Todo es tan rápido, tan imperceptible”.

Toda su vida fue cayendo dentro de si mismo, aquellas escenas caian en forma de pequeños-grandes pedazos de película amarrados con los grandes telones de tantos escenarios en cuyas telas se proyectaba su propio rostro.


-Cual es el sentido de todo lo que hago?


Levanto el rostro intentando, buscando, pidiendo encontrar un rostro, que no había visto nunca, que nunca había encontrado.

Todos los caminos terminan ahí. Siempre regresamos a buscar “eso otro”, que es mas que un rostro.
-“Es tan grande como el universo y los millones de otras posibilidades”.


-A quien le hablo?


Volteo la dirección de su conciencia y se miro para adentro. Miro sus emociones, miro sus pensamientos.

Sintió su energía y comenzó sentir todo su alrededor.

Algún grupo de reggae llamado Gondwuana, vino acompañar aquel momento con alguna canción, en donde la palabra “libertad” se convertía en un canto de todo su ser.

Se permitió ver sus sueños y se fue metiendo en ellos, disfrutándolos, encontrando en ellos el consuelo y la alegría del “no tener limites” para su ser creativo, para su imparable imaginación.

Se vio correr por la playa, sintió la arena seca bajo la cual se guardan pequeños pedazos de sol, pequeñas bolsas de calor.
Sintió la arena moviéndose con el agua, tocando su piel; la arena pegada a su piel humeda.

Corrió a lo largo de la playa experimentando una energia mágica nacida de la unión de la tierra, el sol, el viento y el agua.

Sintió el velo suave, de un llenarse todo, de algo parecido a una tinta muy tenue en tonos entre morados, azules y rojos.

Todos los colores caian, mientras otros los iban sustituyendo, en una secuencia interminable pero armonicamente danzando en el gran ritmo del todo.


Respirar. Respirar y sentir el aire entrando al ser, haciéndolo mas fuerte, alimentándolo. Llenándolo con las fuerzas con las que se mueven todas la cosas en el universo.

“…libertad, libertad, libertad…!

Fue como un pequeño gruñido, luego fue creciendo convirtiendo las emociones primitivas en un sonido largo, fuerte y claro.


Libertaaaddddd ¡


Dejo de sentir la opresión por no llegar tarde a un compromiso.
Dejo de sentir la desesperación de ir en un autobús urbano, dando tumbos rumbo a algún lugar en el que solo hay que seguir haciendo mas y mas cosas que nunca acaban. Cosas que a El no le llenan ese vacio existencial.
Dejo de sentir esas heridas de tantos errores, con los que estaban adornados los caminos de alguna compañerita que nunca se había quedado por fin.

“los caminos de la mente son infinitos”.

Después de aquel grito; se perdió entre los colores del cielo, la espuma del mar serpenteando sobre la arena y el agua, el viento que arrastrando pedazos de sol.

Se sintió uno con el todo.
Vio una gran luz y escucho una voz que no tenia palabras. Una voz que alegra.

Las preguntas dejan de existir, cuando el todo se vuelve una respuesta.


Una caricia al alma, un abrazo eterno al ser.


Vio la luz brillando en sus manos, saliendo de ellas, de las palmas.

Sintió en aquellas manos el oxido de unos clavos que se fueron convirtiendo en metal nuevo, en metal al rojo vivo quemándole con todos los pecados del mundo, con todos los pecados de cada “finísima y bella persona” que habita la tierra y que la ha habitado.

Quemando también los suyos propios nacidos contra el casero que cada mes venia a cobrar y le recordaba su pobreza.
Le recordaba que El no podía dar la ultima palabra.
Que siempre habría alguien arriba de El. Como algún patrón de los que tuvo antes de ser el dueño de su “generador de dinero”.

Como los inspectores, como los policías como la gente en el gobierno, como los que creen que son mas que otros.

La luz seguía saliendo de sus manos. Ahora su energía era mas suave y clara.

Sintio el impulso y fue bajando las manos hasta meterlas en la arena,

Recordó que a veces se le olvidaba como había llegado a la tierra.

Recordó aquellos cuentos de niño, y sintió sus manos fundiendo la arena, transformándola en Silice brillante y transparente.

Vio clara y nuevamente, la imagen que tenia registrada en la memoria y mas alla de la memoria conciente.

Vio la esfera de la tierra. Quito los cielos y fue grabando los bajo relieves, de la grandes sierras, aun la tierra debajo del agua, pudo ver. Y también los grabo en aquel cristal obtenido de la arenas que había tomado entre sus manos.

Fue sacando lentamente las manos de la arena. Rayos de luz salen poco a poco acompañando aquella solida pieza perfecta de cristal de roca transparente y forjada en forma del llamado planeta tierra.

La belleza y la armonía de un mundo de paz; fue uno de los pensamientos que cruzaron por la mente de aquel ser creador y creativo.

Su cuerpo desnudo, levanto los brazos al cielo. En sus manos transparente y llena de luz, una espera que por momentos parecía convertirse en un cráneo humano, en un corazon arrancado por algún sacerdote azteca a algún ser de luz y cristal de roca.

Mas alto y mas brillaba aquella pieza.

A su alrededor, muchos pares de ojos se mueven buscando la noticia de un hombre desnudo en la playa.

Siente la energía a su alrededor, siente las personas.

Siente el deseo de darles algo de lo que el hace.
Deposita lenta y suave, aquella esfera cuya forma era idéntica a la tierra y por cuya transparencia podía incluso observarse, parte del mundo marino.

Vuelve a llevar las manos a la arena, sus movimientos son lentos y suaves. Son todo un ritual de agradecimiento al universo.
De sus labios sale un susurro que parece un canto de alegría. Un canto por la vida, por la libertad, por estar fuera de aquellas rejas de su mente.

-“Una ave blanca y una promesa de paz al universo”

La fina arena volvió a convertirse en una masa de luz y cristal de roca, ahora en forma de una hermosa paloma.

Las alas extendidas enviando destellos de luz, mandando respuestas al universo.

Acuses de recibo a su existencia.
Diciendo: soy yo en un eterno aquí y ahora que se mueve incansable por el universo de todas las formas, de todas la escencias, de un todo que esta dentro de cada uno.

La solto al viento y una paloma de luz se perdió entre las corrientes de aire y la brisa del mar, volando siempre hacia la libertad.

Metió una y otra vez las manos en la arena y de ella sacaba figuras que tenia en la biblioteca de sus imágenes.

Se las aventaba a las personas, eran sus bendiciones, eran sus creaciones, su ser perfecto observador, estaba en completa armonía con sus manos creadoras.

Siguio creando y creando.


La arena es el material mágico. El calor en sus manos la transformaba en objetos deslumbrantes, en hermosas esculturas de cristal de roca.

Cuando entro al baño, nunca pensó en que ese dia sucedería, en ese lugar; un cambio dentro de El.


Jalo la palanca del retrete, se limpio todo lo sucio en su cuerpo, se limpio lo sucio de su ser y se quito toda la ropa.

Giro la llave de paso de aquella regadera que tenia un calenton eléctrico.

Movio un pie y acerco el cuerpo a la caída de agua.
El agua tenia otro sentido, el agua estaba llevándose todos los programas de su vida. Estaba rompiendo con la sociedad y sus reglitas; tan distintas de un lugar a otro.


Se sintió lleno de energía, fresco y limpio.
Sus emociones brillaban de un lado a otro, en una danza linda y ligera. Muy ligera.

Dejo que el agua corriera por su piel y al cerrar la llave se permitió corretear con su sentir, algunas gotas de agua que resbalaban jaladas por eso que le llaman “ley de la gravedad”.
Las sintió resbalando, produciéndole sensaciones causadas por el paso de una traviesa gota de agua, por sobre su piel.

Sintió una y muchas gotas al mismo tiempo, sintió como su conciencia de multiplicaba como un gran pulpo dentro de su sery en cada tentáculo tenia un ojo que podía mirar cada pequeña gota resbalando temblorosa por su piel morena.

Sentir, solo sentir y sentirse bien.


Sentirse bien con uno mismo.



Las personas lo observan, saben de El. Las personas conocen de su proceder,

Siempre es asi.
Cuando las personas están en la playa aparece de pronto este hombre semidesnudo.

Llega, se sienta en una roca muy cerca de las pequeñas olas. Una roca rodeada de arena y agua.

Después de un rato de abstracion, de observar el movimiento de las olas, se levanta sobre la roca y comienza a quitarse la única prenda que porta,

Su caminar es suave mientra sus ojos tiene destellos que hablan de un ritmo frenetico de imágenes internas.

Se acerca a las personas que vacacionan.
Mete las manos en la arena y juntándolas se sirve de ellas para levantar unos puños de arena, que ofrece a los mas cercanos.

Con un gesto se los regala y después con un movimientos ligero de los brazos, se los vienta a los pies.

Sonríe y sigue llenando de arena las palmas de sus manos para luego aventarla a las personas..

Siempre esta sonriendo, pues tuvo la dicha de escuchar
Las palabras que nadie mas escucho.

Tomo la decisión dentro de El y solo se fue en el viaje, dejando una vida normal, en un mundo en el que ya no vivía.

Por fin había logrado destruir a aquellos malos amigos, que siempre estuvieron jorobándole la vida, diciéndole como hacer, que decir; tratando siempre de robarle el derecho de equivocarse o de acertar.

En una mesa de playa, bajo una sombrilla, sentados alrededor de la misma, los que un tiempo dijeron ser sus amigos, seguían haciendo comentarios en un derroche estúpido de saliva:

-se fue, se quedo en el viaje, no aguanto las presiones, solo se desconecto.
-parecia estar tan bien, nadie imaginaba que esto pasaría.
-todos están consternados, todos están sufriendo de verlo asi.
-bla bla bla.
-bla bla bla.


Cuantas veces había venido la policía y se lo había llevado? Cuantas veces regresaba siempre a sentarse a la misma roca, a iniciar el mismo ritual de siempre. A prenderse con la luz del sol y sentir que dios es todo lo que lo rodea, que en el mundo ya no existen los malos momentos.

Se fue , un dia se quedo anclado a una roca, se enciclo metiendo las manos en la arena, sacando puños y aventándola a las personas.
Imaginado que son esculturas de cristal de roca que por algún poder especial le son dados a el.

Al menos es un loquito feliz.

Es el loco que me regalo estos granos de arena que aun guardo en mi bolsillo derecho.
Para mi si es una bendición y a veces creo ver la esfera de la tierra en ese puño de arena.


Cuando lo vi, me refleje en el, se que yo también estoy loco, no he conocido una sola persona que este bien de la cabeza, todo el mundo esta lastimadito del coco. a lo mejor si hay alguno pero pos no tengo la dicha de conocerlo.

A este loquito yo le llamo: mi sombra desnuda sobre la playa.

Es un loco feliz, como yo, como muchos otros que aun disfrutan el negar su locura, la ignorancia les evita sufrir, eso esta chido.

Yo por hoy sigo buscando el aprendizaje, viajando por las costas de un país donde cada lugar tiene un sello en sus personas, un común denominador.

Mañana o tal vez pasado mañana siga mi camino. Por hoy me quedo observando las tantas ventanas que el hombre como ser, puede abrir dentro de el.

Si esta su cuerpo.
Hay cosas que si están, pero El no esta, el ya esta en otro nivel de conciencia. Al menos el tuvo el valor de desconectarse. Yo sigo siendo cobarde aun no me voy en esa puerta brillante que a veces se abre.

Mi admiración y respeto, para todos aquellos seres que siguen esperando que arreglen las pistas de aterrizaje, mientras siguen tirando aceite desde “alla arriba”.

Cuando supe que venia para esta ciudad, venia con todas las esperanzas de conocer al famoso “ahí te encargo”, no se armo, ni modo, me perdi la oportunidad de conocer sobre “la cuarta vertical”. Lo seguire viendo solo por los videos.

En otra ocasión será. Por hoy con este loquito basta, algunos lo conocen como el loco que “se quedo en el viaje por una cagada”.


Se cago en publico, dicen algunos que no soporto la vergüenza de aquel evento.
Otros dicen que fue la crisis económica.
Algunos piensan que se golpeo o que le dieron algún tipo de droga.


Que importa, ya no importa, realmente nada es tan importante. Solo es la vida una posibilidad de divertirse con la creación.

Yo me divierto viendo mis reflejos en algunos locos del camino.
Buen dia.

Mazatlan, Sinaloa a 5 de marzo del 2012. Mas o menos 5:38 p,m.